En ambos casos se hacen evaluaciones mecánicas eléctricas y dieléctricas para diagnosticar su estado y así poder ofrecerle a los clientes el servicio adecuado.
En el caso de los transformadores secos, se hace la revisión de prueba de aislamientos con ttr tanto de Baja como de Alta.
En el caso de los transformadores en aceite, se hace prueba de rompimiento al aceite para checar el nivel de humedad, y posteriormente se hace prueba de aislamiento de alta y baja, así como revisión de todos los radiadores para verificar que no existan fugas de aceite.